hEAvEn ItAmItA
No cabe duda, la mejor semana para visitar el ItAm es la que sigue después de semana santa, creo que esa fue siempre mi semana favorita, no sólo es porque reencuentras a tus amigos, con los que muy probablemente te fuiste de vacaciones una semana antes con un 80% de probabilidad a alguna playa, sino porque son unas vacaciones que caen super bien, así que el ambiente está cargado de buen humor, solecito, y lo mejor de todo, minifaldas y buenos bronceados, no cabe duda, si en nuestro pequeño instituto cupiera el paraíso este sería, al menos por una semana (o hasta el jueves si ya te libraste de las clases en viernes, de los departamentales y de algún maestro chistoso que te pone de reposición).
Pues bien, este año cumplimos una promesa, de esas que haces cuando eres niño y dices, cuando yo sea grande voy a ir a mi escul a ver que hay, así que, platicando con el gran amigo-siempre-tengo-tiempo-para-hacer-cosas-nostálgico-divertidas nos pusimos de acuerdo, el martes en el parte!!!. Por supuesto que yo acababa de regresar de mi viaje a ticolandia y las cosas en la oficina andaban super atareadas, así que a la hora de la reunión yo seguía en una junta, pues bien, ½ hora después las cosas no mejoraban, así que salí corriendo y tuve que tomar un taxi para ahorrar tiempo (en este lugar, para salir necesitas al menos 20 minutos, el estacionamiento está hasta el gorro y hay que mover unos 8 coches promedio para con unos 45 volantazos liberarte), ahhh, que bien se siente decir, al ItAm por favor, como si le dijeras: rápido porque tengo clase, pero no, esta vez era rápido porque muero de hambre…
Llegar al ItAm siempre es una experiencia nueva, nunca sabes que remodelación vas a encontrar, como no acordarnos cuando cambiaron el hermoso piso verde, o cuando uno podía meter la cabeza desde los baños a los cubículos de algunos maestros que tuvieron que huir por el temor a una intoxicación de asbesto, cobarde!!!, ya ni quien se acuerde que antes los pasillos tenían unas ventanitas diminutas, o que decir del gimnasio que reemplazo nuestra cancha de basket de puritito cemento, con esa cancha de fut que se llenaba cuando jugaban los dragones, y si hablamos de remplazar, que me dicen de las canchas de tenis?¿?; esta vez me toco rectoría y biblioteca Titanic, me cae que al cruzar la puerta se escucha la música de la película y en cualquier momento Rose va bajar esas escaleras para iniciar el baile, bueno, ni cuestionar el magnifico gusto de los candelabros, jajaja, en fin, llegué al parte y ahí estaban, caras conocidas, no lo puedo creer, aún hay gente que conozco de aquellos años, por supuesto que ellos ya se deben sentir un poco fosilizados después de casi 8 años de instrucción continua, pero bueno, fuimos a uno de los nuevos restaurantes de la zona, que por supuesto pertenecía a un amigo che (que no es lo mismo que un che amigo), buenas carnes, rica chela, meseros conocidos que antes atendían en un lugar de cucina urbana pero que la necesidad los hace regresar aunque insista que ya no quiere más, pero bueno, aún no se da de baja definitiva, desgraciadamente la prisa era mucha y el taxi no tenía alas, así que tuve que salir de ahí, ah, que recuerdos y que poco tiempo para la chelita, echar la tarde en el parte, jugar un futbolito o la clásica ficha muy radical, pasar una tarde en facultad antes de que nos clausuraran el centro de juegos, tiempos post-ideistas (i.e. una vez que pasas ideas y todas las materias de estudios generales); ay que trabajar pero quien dijo que yo quería madurar?¿?
Ps: Se solicita mecenas, interesados hacer una donación a la cuenta:
Un diablito en el máster
No de cta xxxx :) xxxx
Juntos hacemos el milagro, Va x Mi, México
Pues bien, este año cumplimos una promesa, de esas que haces cuando eres niño y dices, cuando yo sea grande voy a ir a mi escul a ver que hay, así que, platicando con el gran amigo-siempre-tengo-tiempo-para-hacer-cosas-nostálgico-divertidas nos pusimos de acuerdo, el martes en el parte!!!. Por supuesto que yo acababa de regresar de mi viaje a ticolandia y las cosas en la oficina andaban super atareadas, así que a la hora de la reunión yo seguía en una junta, pues bien, ½ hora después las cosas no mejoraban, así que salí corriendo y tuve que tomar un taxi para ahorrar tiempo (en este lugar, para salir necesitas al menos 20 minutos, el estacionamiento está hasta el gorro y hay que mover unos 8 coches promedio para con unos 45 volantazos liberarte), ahhh, que bien se siente decir, al ItAm por favor, como si le dijeras: rápido porque tengo clase, pero no, esta vez era rápido porque muero de hambre…
Llegar al ItAm siempre es una experiencia nueva, nunca sabes que remodelación vas a encontrar, como no acordarnos cuando cambiaron el hermoso piso verde, o cuando uno podía meter la cabeza desde los baños a los cubículos de algunos maestros que tuvieron que huir por el temor a una intoxicación de asbesto, cobarde!!!, ya ni quien se acuerde que antes los pasillos tenían unas ventanitas diminutas, o que decir del gimnasio que reemplazo nuestra cancha de basket de puritito cemento, con esa cancha de fut que se llenaba cuando jugaban los dragones, y si hablamos de remplazar, que me dicen de las canchas de tenis?¿?; esta vez me toco rectoría y biblioteca Titanic, me cae que al cruzar la puerta se escucha la música de la película y en cualquier momento Rose va bajar esas escaleras para iniciar el baile, bueno, ni cuestionar el magnifico gusto de los candelabros, jajaja, en fin, llegué al parte y ahí estaban, caras conocidas, no lo puedo creer, aún hay gente que conozco de aquellos años, por supuesto que ellos ya se deben sentir un poco fosilizados después de casi 8 años de instrucción continua, pero bueno, fuimos a uno de los nuevos restaurantes de la zona, que por supuesto pertenecía a un amigo che (que no es lo mismo que un che amigo), buenas carnes, rica chela, meseros conocidos que antes atendían en un lugar de cucina urbana pero que la necesidad los hace regresar aunque insista que ya no quiere más, pero bueno, aún no se da de baja definitiva, desgraciadamente la prisa era mucha y el taxi no tenía alas, así que tuve que salir de ahí, ah, que recuerdos y que poco tiempo para la chelita, echar la tarde en el parte, jugar un futbolito o la clásica ficha muy radical, pasar una tarde en facultad antes de que nos clausuraran el centro de juegos, tiempos post-ideistas (i.e. una vez que pasas ideas y todas las materias de estudios generales); ay que trabajar pero quien dijo que yo quería madurar?¿?
Ps: Se solicita mecenas, interesados hacer una donación a la cuenta:
Un diablito en el máster
No de cta xxxx :) xxxx
Juntos hacemos el milagro, Va x Mi, México
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